La reconfiguración significativa del mapa político de Europa es una de las principales consecuencias de la Primera Guerra Mundial. Se disolvieron imperios antiguos como el Austrohúngaro, el Otomano, el Ruso y el Alemán, y surgieron nuevos países y estados-nación, como Checoslovaquia y Yugoslavia.
Consecuencias de la Primera Guerra Mundial
Causas económicas:
Estalló una fuerte crisis en Europa debido a los gastos de guerra y a la destrucción de sus principales fuentes de producción provocando desocupación y grandes deudas, siendo su recuperación lenta y penosa. EE.UU. y Japón se encumbraron como potencias económicas convirtiendo a los países europeos en sus acreedores a través de la entrega de créditos.
Nueva potencia mundial:
Es de resaltar el caso de EE.UU. que al haber ingresado al final de la contienda no padeció el desgaste ni los daños materiales que sufrieron los demás países, se convirtió así en el mayor acreedor de los aliados europeos y consolidó su posición como la principal potencia económica mundial. Para restablecer sus economías los países vencedores de Europa impusieron fuertes sanciones económicas a los países derrotados, debido a ello se produjo la ruina económica de Alemania obligada a pagar una enorme indemnización.
Causas políticas:
Declinaron las más poderosas potencias imperiales: Rusia, Austria-Hungría, Alemania y Turquía siendo reemplazados mayormente por estados republicanos.
Desaparecieron las últimas monarquías absolutas: Hohenzollern de Alemania, Romanov de Rusia, Habsburgo de Austria y los Sultanes de Turquía.
Reconfiguró el mapa de Europa y Asia, surgiendo nuevos estados: De Rusia surgieron parte de Polonia, Finlandia, Estonia, Letonia y Lituania; de Austria-Hungría surgieron Austria, Hungría y Checoslovaquia, de Turquía surgieron Siria, Irak, Líbano, Palestina, Transjordania; Serbia, Croacia y Bosnia-Herzegovina formaron Yugoslavia.
Entre las potencias vencedoras se produjeron fuertes rivalidades debido a que comenzaron a disputarse las antiguas posesiones coloniales de los países derrotados, aunque tuvieron que enfrentarse a los emergentes movimientos nacionalistas que luchaban por su independencia.
Resentimiento alemán:
Impulsó el estallido de la Revolución rusa en 1917 y sentó las bases para la emergencia del fascismo en Italia y el nazismo en Alemania. En el caso de Rusia por las grandes pérdidas materiales y humanas que produjo deslegitimaron al régimen zarista, en Italia no se sintió debidamente recompensada en sus ambiciones y sumada a la aguda crisis incrementó el resentimiento hacia las potencias vencedoras, en Alemania las excesivas sanciones establecidas por Versalles favorecieron el revanchismo contra los países que lo impusieron.
Causas sociales:
El saldo de la guerra fue altísimo siendo aproximadamente de 9.000.000 de muertos y de 20.000.000 de heridos y mutilados, sin contar los civiles. A ello debe agregarse la desocupación de la masa trabajadora.
La otra gran sacrificada de la guerra fue la población civil, que no pudo sustraerse a la debacle generalizada, siendo la principal victima de las deportaciones y represiones (como la de los turcos contra los armenios, los alemanes contra los belgas), las epidemias y el hambre, sólo en Alemania 763.000 habitantes fallecieron por desnutrición.