En 1826 Bolívar impuso la Constitución Vitalicia que combinaba el principio de autoridad y el de la democracia.
Antecedentes de la Constitución Vitalicia
Luego de la victoria en la batalla de Ayacucho Bolívar continuaría como Dictador por aprobación del Congreso peruano a la vez que se declaraba en receso para dejarlo en libertad de acción.
Bolívar inicia una gira por el Alto Perú y el 9 de julio de 1825 en la Asamblea Deliberante convocada por Sucre en Chuquisaca se declara la independencia de esa región que tomaría el nombre de Bolivia (en honor a Bolivar).
Sucre sería el primer presidente de Bolivia, se redacta y aprueba una Constitución Vitalicia, donde Bolívar sería el presidente vitalicio. De esta manera volvía la oportunidad de constituir la Confederación de los Andes que los conformaría Bolivia, Perú, Quito, Colombia y Venezuela.
¿Qué era la Confederación de los Andes?
Durante la corriente libertadora del norte, la propuesta bolivariana consideraba la unión de los territorios anteriormente libertados por Bolívar, nos referimos a Perú, Bolivia y la Gran Colombia, los cuales integrarían un nuevo espacio denominado Federación de los andes.
La Federación de los Andes fue el segundo proyecto político de Simón Bolívar para la América española tras la independencia, pero para ello era imprescindible que las nuevas republicas juramentasen la Constitución Vitalicia que permitiría a Bolívar ser la cabeza de la federación.
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La Constitución Vitalicia de Bolívar
Luego de Ayacucho, Bolívar impuso la Constitución Vitalicia que combinaba el principio de autoridad (gobierno centralista, fuerte y estable) y el de la democracia (sufragio).
Perú intentó promover en 1826 una Constitución similar a la Constitución consular francesa de 1799. La carta política fue discutida y aprobada por la asamblea de Bolivia, en mayo de 1826. Paralelamente, en el Perú, el Congreso electo para aprobarla fue instalado el 29 de marzo de 1826, pero al advertirse una creciente oposición, fue clausurado el 1 de mayo. Entonces se decidió que la Constitución vitalicia fuese sometida a la aprobación de los colegios electorales del Perú, y el resultado fue su aprobación unánime, con la única excepción del voto de Tarapacá. Para entonces, Bolívar había partido a la Gran Colombia con la intención de contener el clima de descontento entre sus generales, generado por su polémico proyecto federativo.
Proclamación de la constitución vitalicia
En consecuencia, fue al Consejo de Gobierno, presidido por el mariscal Santa Cruz, a quien correspondió declarar la Constitución bolivariana como ley fundamental el 30 de noviembre de 1826. Pero inmediatamente se incubó la conspiración de los políticos peruanos, liderados por el desterrado sacerdote arequipeño Francisco Javier de Luna Pizarro, no dispuestos a que, en nombre de la federación y una constitución común, prosperase el tratado de límites con Bolivia.
Fin de la Constitución vitalicia
El discurso nacionalista antibolivariano quedó engendrado y cumplió su objetivo cuando las tropas grancolombianas fueron expulsadas del país, el 26 de enero de 1827. Al día siguiente se produjo la abolición de la Constitución vitalicia, con la anuencia de los defensores del restablecimiento de la Constitución de 1823.
Fin de la influencia de Bolívar
En setiembre de 1826, Bolívar tuvo que abandonar el país debido a problemas políticos que ocurrían con Colombia dejando un consejo de gobierno presidido por Santa Cruz.
A su salida revivieron las tendencias nacionalistas: las democráticas (encabezadas por Luna Pizarro) y las personalistas (caudillescas). Los prefectos y generales bolivarianos (Gamarra, La Fuente y Santa Cruz) aspiraban a alcanzar el mando político supremo.
El final de Bolívar fue fatal, entregó la Gran Colombia y perdió toda la autoridad, le quisieron matar varias veces, pero murió de tuberculosis a los 47 años de edad, en la hacienda San Pedro Alejandrino en Santa Marta-Colombia.