Cuidar tu piel con ingredientes naturales tiene varias ventajas; por ejemplo, los productos naturales suelen ser más suaves y menos propensos a causar irritaciones o reacciones alérgicas en comparación con productos químicos.
¿Por qué cuidar mi piel con ingredientes naturales?
Imagina recorrer los pasillos de cuidado de la piel y encontrar ese producto perfecto que presume de ingredientes totalmente naturales. Casualidad, ¿verdad? Entonces vas y lees la etiqueta esperando encontrar una ensalada virtual pero en su lugar te encuentras leyendo ácido benzoico, estearato de butilo y algunos nombres totalmente impronunciables.
No eres un botánico, pero estás seguro de que esas cosas no crecen en los árboles. Esto se debe a que la mayoría de los productos comerciales destinados al cuidado de la piel en la actualidad contienen conservantes y otros productos químicos para mantener su consistencia y vida útil. El problema es que la mayoría de estos productos químicos pueden irritar las pieles más sensibles.
¿Qué solución hay para este tipo de crisis?
Sencilla. Mezcla tu propia línea de cuidado de la piel casera. No hay nada más complicado, ya que la mayoría de los ingredientes se encuentran en el frigorífico o en la cesta de fruta. Es fácil encontrar recetas para la piel totalmente naturales en Internet o incluso en revistas. Por lo general, estas mezclas para el cuidado de la piel se componen de una combinación de una o dos frutas. Estas combinaciones pueden incluir la pulpa de la fruta, el zumo de fruta o ambos. Normalmente se añade leche, agua o miel para suavizar la mezcla. También se incluyen complementos como avena, germen de trigo, azúcar moreno y hierbas secas para brebajes más especializados, como un tratamiento para el acné, la descamación y la piel grasa.
El cuidado de la piel con ingredientes naturales ofrece una gran variedad. Existen limpiadores faciales, exfoliantes, cremas hidratantes y mascarillas faciales. No te preocupes porque las indicaciones de uso suelen encontrarse junto a las recetas. Las recetas indican si la mezcla es para pieles normales, secas, grasas, sensibles y propensas al acné. Algunas son incluso más especializadas como los removedores de puntos negros o las soluciones blanqueadoras.
Las rutinas naturales de cuidado de la piel tienen muchas ventajas. En primer lugar, los ingredientes están fácilmente disponibles y las opciones son excelentes. También son naturales, por lo que reducen en gran medida los riesgos de alergias o irritaciones de la piel. En segundo lugar, los ingredientes son baratos, lo que se traduce en más ahorros para ti. En tercer lugar, puedes modificar las recetas para adaptarlas a tus necesidades. Dado que los riesgos de irritaciones son mínimos, la experimentación es relativamente segura. En cuarto lugar, las vitaminas y los antioxidantes se encuentran de forma natural en las frutas, mientras que la leche y la miel tienen propiedades reparadoras. Por lo tanto, obtienes las mismas vitaminas que se encuentran en los productos comerciales, al tiempo que limitas o erradicas los productos químicos.
Como estas recetas de cuidado de la piel utilizan ingredientes naturales, requieren refrigeración y solo se pueden conservar durante una semana. Sin embargo, es mejor hacerlas en pequeñas cantidades o lotes para su uso inmediato. Además, estas recetas contienen hidroxiácidos naturales y vitaminas para un rejuvenecimiento cutáneo directo e instantáneo. Además, no olvides mantenerte en forma haciendo ejercicio, teniendo una dieta equilibrada y saludable y durmiendo con regularidad. Con estos requisitos previos y tus nuevas soluciones para el cuidado de la piel, estás en camino de tener una piel saludable que puede superar lo que la ciencia puede ofrecer. Eso sí que es natural.
