El Humanismo y el Renacimiento fueron impulsados por la burguesía. El primero de ellos nace durante la Baja Edad Media. En términos generales, el humanismo italiano es el movimiento cultural filosófico y literario que surgió hacia el siglo XIV con la finalidad de “humanizar” al hombre.
Humanismo italiano
El Humanismo surgió en las ciudades del norte Italia, donde el recuerdo de la cultura romana estaba vigente y la necesidad de identidad para la burguesía era muy fuerte. Además, como ya señalamos, la llegada de los sabios bizantinos desde el siglo XV permitió mejoras considerables en la educación. El proceso de desarrollo cultural acompañó al crecimiento económico del capitalismo inicial, con autores como Dante Alighieri (1265-1321) con la Divina comedia, Francesco Petrarca (1304-1374) con Poemas a Laura, y Giovanni Boccaccio (1313-1375) con el Decamerón, convertidos en precursores del Humanismo.
Este capitalismo inicial enriqueció a numerosos nobles y burgueses que se volvieron mecenas de escritores y artistas, como sucedió en Florencia gobernada por la familia Médicis, que se convirtió en el modelo de centro cultural con un sentido clásico, siendo ensalzada en la obra del primer historiador humanista, el florentino Leonardo Bruni (1374-1444) con su obra Laudatio Florentinae urbis o La historia de Florencia.
A nivel de los planteamientos filosóficos las ideas de Aristóteles fueron superadas por las de Platón y de esa manera el sabio Marsilio Ficino fundó en 1440 la Academia Platónica de Florencia, de la que salieron importantes personajes, como Pico de la Mirándola (1463-1494), autor de Diálogo sobre la dignidad del hombre, y Nicolás Maquiavelo (1469- 1527), autor de El Príncipe, y de Historia de Florencia. En El Príncipe, donde se exponen los fundamentos de la nueva política basada en la razón de Estado necesaria para las monarquías autoritarias. Pero el autor italiano que mejor caracterizó la nueva mentalidad burguesa fue Baltasar Castiglione (1478-1529), con su libro El Cortesano.
Humanismo fuera de Italia
Desde fines del siglo XV en varios territorios europeos comenzaron a aparecer intelectuales humanistas, pero a pesar de esta demora, el mayor autor humanista fue el agustino holandés Geert Geertsen (1469-1536) que escribió bajo el pseudónimo de Desiderio Erasmo de Rotterdam el Elogio de la locura, primer libro de crítica social y política de la época desde una visión europea.
En España se pueden mencionar los aportes de Antonio de Nebrija (1444-1532), autor de la Gramática castellana, y Juan Luis Vives (1492-1540) autor de las Disciplinas y del Liber in pseudo dialecticos.
Mientras que de Inglaterra es necesario mencionar la figura del humanista, literato y político Tomás Moro (1478-1535) autor de Utopía, quien por la defensa de sus ideas y creencias religiosas católicas se opuso a la voluntad del rey Enrique VIII, siendo acusado de traición y ejecutado.
Entre los humanistas franceses podemos destacar a François Rabelais (1483-1553), autor de La vida nobilísima del gran Gargantúa y Pantagruel rey de Dipsop, así como Michel de Montaigne (1533-1592), autor de Ensayos, texto con los fundamentos políticos de la monarquía autoritaria francesa.