Napoleón Bonaparte fue llamado “El gran corso”. El ascenso de Napoleón constituye un gobierno conservador de característica autocrática, a esta etapa en la historia de Francia se la conoce como el Imperio francés.
Etapa Imperial (1804-1815)
Si bien el pretexto para la investidura imperial de Napoleón fue la ruptura de la paz con Inglaterra y el intento de una restauración realista, tenía como objetivo la igualdad política de su investidura (titulo de Emperador) frente a la de los otros soberanos europeos que eran reyes o emperadores, es decir buscaba que los demás soberanos de Europa lo reconocieran como un igual, aspecto que no lograría si se mantenía con el titulo de Cónsul Vitalicio.
También tenía por objetivo convertir a Francia en primera potencia de Europa y expandir el mercado comercial francés, lo cual intentaría lograr con las guerras napoleónicas, por la que propagaría las ideas liberales de la Revolución francesa. Su proyecto era establecer así una Europa continental que estuviera unificada en su persona, bajo los principios del liberalismo.
Durante el Imperio francés Napoleón tuvo que luchar contra cinco coaliciones europeas, formadas sucesivamente por su enemigo acérrimo: Inglaterra. Las guerras contra las coaliciones buscaban expandir el proyecto napoleónico ya que por lo general en cada territorio ocupado se abolía el feudalismo, suprimía los diezmos, vendía bienes eclesiásticos y elaboraba códigos civiles. Sobre todo las guerras napoleónicas fue un choque de intereses de la burguesía francesa y británica.
Guerras napoleónicas:
La tercera coalición fue formada en 1805 por Inglaterra, Rusia, Suecia, Austria y Nápoles que se enfrentaron a Francia y España en tanto que Prusia persistía en su neutralidad. La flota franco-española dirigida por Villeneuve fue derrotada en Trafalgar (21 de octubre de 1805) por la flota inglesa dirigida por Nelson.
A pesar de ello derrotó al ejército austro-ruso en Austerlitz (2 de diciembre de 1805) la cual fue llamada la «batalla modelo» por la brillante táctica militar usada por Napoleón. Austria firmó el Tratado de Paz de Presburgo (1805) por el que su Emperador renunciaba a la posesión de «Alemania», esto le permitió unir a los estados germanos en Confederación del Rin.
Cuarta coalición
La cuarta coalición fue formada en 1806 por Prusia, Rusia, Sajonia e Inglaterra. Napoleón derrotó a Prusia en Jena, lo cual le permitió ingresar a Berlín, donde firmó el decreto del bloqueo continental contra Inglaterra (21 de noviembre de 1806) por el que prohibía todo tipo de comercio con los ingleses cerrándose los puertos del continente a los barcos y productos británicos.
Esta medida terminó en el fracaso debido a que la burguesía de los territorios bajo la influencia napoleónica se perjudicaron en la medida que los ingleses vendían sus mercaderías a un precio más bajo y eran de mejor calidad. Debido a ello se generalizó el contrabando y países como Rusia y Portugal abiertamente, desacataron dicho decreto motivando la intervención francesa. La primera fue derrotada provocando la rendición del zar Alejandro I y junto con Prusia firmaron la Paz de Tilsit. Con relación a la segunda fue derrotada al pasar los ejércitos franceses por España posteriormente se negó a desocuparla entregando la corona a su hermano José Bonaparte que asumió el trono con el nombre de José I.
Quinta coalición
La quinta coalición fue formada en 1809 por Austria, Inglaterra, España y Portugal. Si bien derrotó a los austríacos en Wagram (julio de 1809), en España comenzaría su debacle en el continente al ser vencido con el apoyo de Inglaterra, la cual culminarla en su campaña de Rusia (rompió con la Paz de Tilsit reanudando su intercambio con los ingleses) en 1812, donde fracasó ante el crudo invierno, la táctica de tierra arrasada utilizada por los rusos y su posterior contraofensiva, sumado al hambre y carestía que sufrieron sus ejércitos, por lo cual se vio obligado a abandonar la campaña rusa que le produjo grandes pérdidas de hombres.
Sexta coalición
La sexta coalición fue formada en 1813 por Rusia, Inglaterra, Prusia, Austria y Suecia. Napoleón fue derrotado en la batalla de Leipzig (octubre de 1813) o batalla de las naciones por el general prusiano Blucher. Ante el ingreso de los coaligados a París se formó un gobierno provisional presidido por Talleyrand, siendo obligado a abdicar Napoleón (6 de abril de 1814), y a ser desterrado a la Isla de Elba (costa de Italia), conservando su título de Emperador y una pensión del Estado francés.
Caída del Imperio francés
La caída de Napoleón significó la caída del Imperio francés, lo que provocó la restauración de la dinastía borbónica siendo nombrado rey de Francia Luis XVIII hermano de Luis XVI, el cual fue apoyado por las potencias europeas. La vuelta al Antiguo Régimen por parte de Luis XVIII hizo fracasar su gobierno, ante ello Napoleón abandonó su exilio en la Isla de Elba desembarcando secretamente en Francia el 1 de marzo de 1815. El rey Luis XVIII huyó a Bélgica y Napoleón toma el poder iniciando el llamado «Gobierno de los Cien días».
Ante ello se formó la séptima coalición que estuvo integrada en 1815 por Inglaterra, Prusia, Austria y Suecia, las cuales declararon a Napoleón fuera de la ley a pesar de sus intentos por aproximarse a las potencias coalicionistas.
Finalmente fue derrotado en Waterloo el 18 de junio de 1815 por prusianos e ingleses. Napoleón en París abdicó por segunda vez siendo desterrado a la Isla de Santa Elena (costa Occidental de África), murió el 5 de mayo de 1821. En Francia volvió al poder el rey Luis XVIII quien gobernó (1815-1824) quien restableció nuevamente el absolutismo.