Los habitantes de las diferentes polis griegas, y sus colonias, se sentían vinculados por lazos religiosos, lingüísticos y culturales que se manifestaban a través de las tradiciones y los rituales compartidos. Uno de estos lazos más significativos fueron los deportes que se desarrollaron sólidamente en la Antigua Grecia.
Deportes en la Antigua Grecia
La práctica de deportes en la Antigua Grecia se remonta desde la civilización minoica con el deporte de saltar toros. Los juegos minoicos de toros tenían lugar en los grandes palacios de la isla de Creta. Los acróbatas, hombres y mujeres, daban saltos sobre el lomo del toro. Otra persona esperaba detrás del animal para atrapar a los acróbatas.
¿Qué era el deporte para los griegos?
En la Antigua Grecia los deportes no eran solo un entretenimiento muy apreciado; sino que se relacionaban con aspectos higiénicos, estéticos, militares, éticos, etc. También destacan las instalaciones deportivas como los estadios, donde se desarrollaron diversos eventos como los Juegos Panhelénicos, siendo el más importante las Olimpiadas en honor al dios Zeus.
Objetivo del deporte griego
Los deportes en la Antigua Grecia eran un elemento fundamental en la formación educacional de los jóvenes griegos, que desde la infancia hasta la adolescencia les hacían desarrollar actividades físicas de carácter obligatorio. Posteriormente los jóvenes iban al gimnasio, los cuales eran centros importantes en la vida de los griegos, donde se les instruía con mayor profundidad en diversas disciplinas deportivas.
Los Juegos Olímpicos griegos
La disputa de los Juegos Olímpicos se celebraban cada cuatro años en la ciudad de Olimpia. En estos eventos, que se iniciaron en el año 776 a.C., los atletas competían en distintas disciplinas deportivas: boxeo, atletismo, carrera de carros, lanzamiento de jabalina y lucha.
Las competencias buscaban fortalecer la unidad del pueblo griego, adorar al dios Zeus y propiciar la paz. Así, durante su desarrollo, las guerras se suspendían. Cada triunfador era premiado con una corona de olivo y obtenía fama y respeto no solo para ellos, sino también para sus polis.