La depresión leve, también conocida como distimia o trastorno depresivo persistente, es una forma de depresión que presenta síntomas menos severos que la depresión mayor.
¿Qué es la la depresión leve?
La depresión leve se puede conceptualizar como un estado de ánimo negativo persistente que interfiere con la vida cotidiana, pero que no alcanza la intensidad o duración de un episodio de depresión mayor. Se caracteriza por un deterioro funcional menor, lo que significa que aunque la persona puede experimentar síntomas, a menudo puede seguir realizando sus actividades diarias.
Síntomas comunes
- Tristeza persistente: Sensación de melancolía o vacío que dura varias semanas o más.
- Fatiga: Falta de energía o motivación, incluso para actividades que solían ser placenteras.
- Alteraciones del sueño: Insomnio o hipersomnia (dormir demasiado).
- Cambios en el apetito: Pérdida de interés por la comida o comer en exceso.
- Dificultad para concentrarse: Problemas de atención o de toma de decisiones.
- Sentimientos de inutilidad: Baja autoestima y autocrítica.
Estrategias para tratar la depresión leve y evitar que empeore
Aunque los síntomas son más sutiles, el tratamiento sigue siendo esencial. Puede incluir terapia psicológica, cambios en el estilo de vida, y en algunos casos, medicación.
Considere la posibilidad de adoptar una mascota
Los estudios han demostrado que las personas que tienen mascotas, incluidos gatos o perros, viven una vida más feliz y saludable. La razón es que las mascotas brindan compañía y amor incondicional, que es una de las razones por las que pueden ayudar a eliminar casos menores de depresión y/o estrés.
Una rutina regular de ejercicios puede ayudar a tratar la depresión, incluyendo caminar o trotar tranquilamente.
Los expertos creen que caminar durante 30 minutos cada día puede ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad, que a menudo conducen a la depresión, y también puede mejorar la salud cardiovascular.
Busque un pasatiempo que disfrute.
Si tiene demasiado tiempo libre, considere la posibilidad de trabajar como voluntario en un hospital local o participar en algún tipo de actividad comunitaria que le ofrezca satisfacción y disfrute personal. Después de todo, las manos ocupadas son manos felices.
La falta de sueño es una de las principales causas del estrés y la ansiedad, que están directamente relacionadas con la depresión.
Para mejorar la calidad de su sueño, asegúrese de que su colchón sea cómodo, al igual que su almohada. También puede ayudar mantener su dormitorio a una temperatura agradable para que pueda dormir profundamente durante la noche sin que lo interrumpan las temperaturas altas o bajas. Y finalmente, el uso de filtros de aire portátiles ayudará a eliminar los alérgenos del aire y dejará su habitación con una sensación de limpieza. Esto puede ayudar a aliviar las alergias, que a menudo alteran el sueño y pueden provocar ansiedad durante el día.
Considere la causa de su depresión e intente eliminarla de su vida.
Ya sea un trabajo o una relación, puede eliminarla eficazmente alejándose de la causa. Si su trabajo es estresante debido a la cantidad de horas que pasa en él, considere reducir las horas extras a cambio de disfrutar más en casa y con la familia. Si sus estudios son demasiado exigentes, considere evaluar sus cursos y cuáles son los más importantes para su educación. Si una relación es lo que lo tiene estancado, considere una sesión de terapia de pareja o hable con su pareja sobre lo que sea que lo esté preocupando. Si el problema es demasiado grande para resolverlo, considere pasar un tiempo separados para reevaluar su relación y ver si la depresión se alivia después de una separación de prueba.
Cualquier persona que note los síntomas de depresión o crea que puede tener un problema, debe consultar a un médico para obtener un diagnóstico adecuado y/o una recomendación de tratamiento.