Cuidar de la Tierra es de vital importancia. ¿Qué podemos aprender de la Tierra, la gran dadora? El mundo celebra el día de la tierra de diferentes maneras. En varios países se celebra el 22 de abril, mientras que el Día Internacional de la Tierra se celebra el día del equinoccio de primavera.
Artículo de opinión: Aprendamos a cuidar de la Tierra
El día se observa para concienciarnos a todos de nuestras responsabilidades hacia nuestra tierra. La forma en que hemos estado sacando todo lo que podemos de la Tierra algún día acabará con todo el carbón y los hidrocarburos de la Tierra. Lo mismo con todos los minerales. Estamos extrayendo todo lo que podemos.
La tierra es nuestra mejor amiga, pero nosotros, los terrícolas, nos comportamos como si fuéramos los amos. La tierra nos da la atmósfera para respirar, el agua para beber y los alimentos para comer. Nos brinda miles de variedades de plantas y nos brinda el lugar para hacer nuestro hogar. La tierra nos da todo sin protestar.
Tendencia egoísta va en contra del hecho de cuidar de la Tierra
Los seres humanos suelen querer aún más de todo lo que obtenemos. No somos felices simplemente contemplando las grandes maravillas naturales. El hielo, las grandes llanuras, las altas montañas, miles de animales, insectos, aves, los océanos y la vida marina diferentes. La tierra nos lo da todo y debería ser muy satisfactoria para nosotros. Sin embargo, lamentablemente la mayoría de nosotros hemos olvidado el espíritu de agradecimiento. Agradecemos a nuestros amigos por el más mínimo favor pero nos olvidamos de agradecer a la tierra. Cuidamos de nosotros mismos, de nuestra familia y de nuestros amigos, pero no cuidamos la Tierra.
Una lección que se puede aprender inmediatamente de esto es que si no protestas, seguirás siendo explotado. La segunda lección, a menos que actúes con avaricia, nadie respetará tu gran corazón. Si la Tierra hubiera sido avara, habríamos sido muy cuidadosos. Pero, como da en abundancia, el ser humano suele aprovecharse. La tercera lección que se debe aprender es el espíritu de dar para hacer felices a los demás. Eso es lo que hace la tierra. Si nos volvemos tan generosos en nuestra vida, gran parte de la miseria puede desaparecer. Pero, primero todos debemos aprender a dar y no a pedir. Ese es el gran mensaje de la Tierra.